sábado, 14 de noviembre de 2009

SEMINARIO 5: MALTRATO INFANTIL Y DE LA MUJER


Violencia intrafamiliar según la OMS se refiere a todas las formas de abuso que ocurren en las relaciones entre los miembros de una familia. Esto, incluye toda conducta que – por acción u omisión – dañe física o psicológicamente a otro miembro de la familia. Estas expresiones de violencia pueden ser el maltrato infantil, la violencia en la pareja (en contra de la mujer, del hombre o cruzada y el maltrato a ancianos) (Manual de apoyo técnico para las acciones de salud en violencia intrafamiliar)

El concepto de maltrato infantil, se refiere a los niños (as) menores de 18 años que sufren ocasional o habitualmente actos de violencia física, sexual o emocional, ya sean, en el grupo familiar o en las instituciones sociales. (UNICEF 1989)

Maltrato femenino es todo acto de violencia basado en la partencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida publica como en la vida privada (OPS).


Etapa para proceder frente a un dilema ético


Etapa 1: Preguntarse ¿Se trata de un dilema ético? Si una revisión de datos científicos no resuelve la cuestión, es confusa y la respuesta tendrá una enorme relevancia en varías áreas del conocimiento humano, puede existir un dilema ético.

Etapa 2: Reunir toda la información relevante sobre el caso.

Etapa 3: Examinar y determinar los propios valores sobre las cuestiones; esto llevará a una clarificación de los valores que serán necesarios en la resolución del dilema.

Etapa 4: Verbalizar el problema con una afirmación clara y sencilla del dilema.

Etapa 5: Considerar las posibles vías de actuación, haciendo una lista de las posibles acciones.

Etapa 6: Negociar el resultado; lo que requiere confianza en el propio punto de vista y un respeto por las demás opiniones.

Etapa 7: Evaluar la actuación.



Dilemas éticos



Resguardo de la privacidad del paciente y familia: El profesional de enfermería debe mantener el secreto profesional, pero este se enfrenta a un conflicto cuando se pesquisa un maltrato y la persona involucrada quiere que la situación no sea comentada, ya que esto debe ser informado oportunamente al equipo de salud para una intervención.


Frente a la pesquisa de casos que existe maltrato hacia la mujer o un niño: Los sentimientos generados por el maltrato son muy contradictorios. Las mujeres quieren salir de una situación dolorosa, pero también se sienten atrapadas en los afectos. Esto hace que muchas veces culpen al profesional de no atenderlas, de decidir por ellas o demandan mucha atención, esto puede causar mucho cansancio en los profesionales. En ocasiones la víctima no siente valor para hacer explícita esta situación y la demanda en la consulta es ambigua e inespecífica y siente vergüenza, culpa, lealtad hacia el agresor, creencias arraigadas en el secreto de familia, etc.


Maltrato y dependencia económica: Existen familias que desde sus padres y abuelos el maltrato es común, lo ven en su familia y a su alrededor, por lo tanto no es una causa de denuncia ni de cambio de conducta, a esto se suma que en la mayoría de los casos el padre de la familia es el proveedor y también el agresor, por lo tanto la mujer se hace dependiente económicamente y teme separarse de esta seguridad monetaria, aunque esté el maltrato de por medio. En esta situación se plantea el hecho de denunciar tal agresión como profesional de enfermería, como debe ser, ya que se pone en peligro la vida de personas.


Ayudar en caso de represalias: Además de ayudar en la situación de ayudar a las personas maltratadas se encuentran las represalias que sin duda estarán contra el profesional de la salud, que irrumpió en un hogar y para el agresor es culpable de la separación de su familia, el dilema se presenta cuando se pierde la seguridad propia por mantener la seguridad de las personas, muchos profesionales están dispuestos a correr el riesgo.


Cambio en los esquemas: En caso de maltrato el profesional no solo se guía por las lesiones, sino que además interviene en patrones de conducta, crianza, cultura, valores de cada familia, pues la atención profesional se dificulta cuando se ha producido violencia, y no se valora con intención de daño. No solo basta con entregar educación e información a las familias sobre lo que realmente es el maltrato, sino interferir en su patrón de vida y tratar de ajustarlo a lo que a nosotros nos parece correcto. Por lo tanto el problema se da cuando nuestra forma de pensar se contrapone con la conducta de los familiares porque viven en un mundo en donde estas conductas más que actitudes dañinas, son justificadas como hábitos de crianza que funcionan efectivamente en su ambiente familiar y evitan males mayores según sus percepciones.


Hasta donde llegar: El dilema ético de atender a los niños, también incluye la dificultad que representa para los profesionales el cumplimiento de algunos procedimientos legales específicos, como la notificación de los casos, la recolección de evidencia o la participación del paciente y "su doctor" en los juicios.



ROL DE ENFERMERIA

La enfermera es el profesional que les brinda atención y compañía a las personas en situación de maltrato, debido a que por lo general son niños y mujeres quienes lo sufren, debe establecer una relación de confianza de modo que ellos puedan expresar y comunicar sus vivencias, y así poder intervenir derivando a los centros sociales correspondientes que se hagan cargo de la situación, permitiéndoles a estas personas obtener una nueva oportunidad de salir del problema en el que se encuentran. También debe educar a los grupos más vulnerables acerca de lo que deben hacer en estos casos, evitando así llegar a consecuencias peores, promoviendo campañas de salud contra el maltrato físico entre otras.

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